Observando una realidad logística que tiene a todo el sector con demasiados atosigamientos; es necesario “navegar” no solo a través de esta realidad, sino, no sacar la vista del objetivo.
Manteniendo el argumento en que “Sin logística no hay comercios” (Reps) y estos que deben inexorablemente seguir surcando aire, mar y tierra, porque la demanda mundial de insumos y alimentos no cesa; es necesario continuar con los avances que se están alcanzando a pasos agigantados. Por lo que la adaptación a los mismos no es una necesidad sino una urgencia.
Claro, que no podemos dejar de prestar extrema atención a las varias disrupciones que se nos están presentando y en este año, especialmente de manera consecutivas. Ya sean las guerras (Rusia/Ucrania. Israel/Hamas); la sequía en Panamá que provocó la reducción en el tránsito de barcos por el canal; otras varias manifestaciones climáticas que también ocasionan graves inconvenientes. Las muchas manifestaciones sociales que se están dando en diversos países y en todo el mundo. Los inconvenientes geopolíticos; económicos/financieros; aquellos provocados por falta de Derechos Democráticos o pseudos democráticos; etc. y etc.
Pese a todo lo considerado en párrafos anteriores, es menester no perder el objetivo. Y es por ello por lo que la Organización Mundial de Ciudades y Plataformas Logísticas, en su 8vo Foro Mundial, con modalidad virtual www.foromundialhonduras.omcpl.org abordará aspectos trascendentales que no hacen otra cosa que corroborar la necesidad de “mejorar la navegabilidad dentro de la tempestad que se nos presenta”.
Ellos son:
Las Ciudades Inteligentes o "Smart Cities",
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) considera que: “una Ciudad Inteligente es aquella que coloca a las personas en el centro del desarrollo, incorpora Tecnologías de la Información y Comunicación en la gestión urbana y usa estos elementos como herramientas para estimular la formación de un gobierno eficiente que incluya procesos de planificación colaborativa y participación ciudadana. Al promover un desarrollo integrado y sostenible, las Ciudades Inteligentes se tornan más innovadoras, competitivas, atractivas y resilientes, mejorando así vidas.”
Según estudios varios presentan que, más de la mitad de la población mundial vive en ciudades. Y que de aquí a 2050, siete de cada diez personas vivirán en zonas urbanas. Las ciudades son responsables de más del 70% de las emisiones mundiales de carbono y entre el 60% y 80% del consumo de energía. A esto hay que sumarle que la sobrepoblación de ciudades expone a sus ciudadanos a desigualdad social, congestión del tránsito vehicular, contaminación del agua y problemas de salud conexos.
El Smart City Index 2023, publicado por el International Institute for Management Development (IMD) y la Organización Mundial de Ciudades Inteligentes y Sostenibles (WeGO), evaluó 141 smart cities de todo el mundo a través de encuestas a sus ciudadanos y datos económicos y tecnológicos. Esta edición está liderada por Zúrich (Suiza), seguida por Oslo (Noruega) y por primera vez entre los 3 primeros una ciudad de Oceanía, Canberra (Australia). Le siguen: Copenhague (Dinamarca), Lausana (Suiza), Londres (Reino Unido), Singapur, Helsinki (Finlandia), Ginebra (Suiza) y Estocolmo (Suecia).
Esta clasificación refleja la experiencia real de vida de la población producto de los datos directamente extraídos del Índice de Desarrollo Humano (IDH) del Global Data Lab., que mide la esperanza de vida, los años previstos de escolarización, la media de años completados de educación y la renta per cápita de los habitantes de cada ciudad.
¿Y América Latina?
El informe indica que las principales ciudades latinoamericanas han descendido de posición en su mayoría con respecto al 2019. El impacto de la pandemia, así como las crisis políticas y económicas en toda la región, han impactado en la mejora de las ciudades y de la calidad de vida.
Medellín, de estar en el puesto 82 en el 2019 ha descendido al puesto 118; seguida por Santiago de Chile, que de estar en el puesto 79 y ser la ciudad latinoamericana con la mejor ubicación, hoy está en la ubicación 119. Ciudad de México pasó de estar en el puesto 90 en el 2019 al puesto 121; tres puestos más abajo (124) está la ciudad de Buenos Aires, que en el 2019 estuvo en el puesto 88. Le siguen Brasilia (128), San José de Costa Rica (127), Bogotá (129), Sao Paulo (130), Lima (134) y Río de Janeiro (136).
La caída en el ranking más significativa fue la de Santiago de Chile, con 40 puestos; sin embargo, el promedio de caída de las principales ciudades es de 35 puestos en su mayoría. Sin dudas tenemos mucho “para navegar”.
La logística 5.0
Surgió como una evolución de los sistemas logísticos tradicionales, impulsada por los avances tecnológicos y la digitalización de los procesos. Este concepto está cobrando cada vez más relevancia, ya que se basa en el uso de tecnologías como la inteligencia artificial, el internet de las cosas, el big data y la automatización, que permiten una mayor visibilidad y control de los procesos, así como una toma de decisiones más rápida y precisa.
Uno de sus principales beneficios es la mejora en la eficiencia operativa. Gracias al uso de sensores y dispositivos conectados, se puede monitorear en tiempo real el estado de las mercancías, los vehículos y las instalaciones, lo que permite una gestión proactiva de los imprevistos y una reducción de los tiempos de respuesta. Además, la aplicación de algoritmos de inteligencia artificial en la planificación de rutas y la asignación de recursos optimiza los trayectos y reduce los costos de transporte.
La digitalización facilita el seguimiento y la trazabilidad de los productos desde su retorno hasta su reutilización o disposición final, lo que contribuye a una gestión más eficiente de los recursos y una reducción de los impactos ambientales.
Otro aspecto destacado es la integración de los diferentes actores de la cadena de suministro a través de plataformas digitales. Esto facilita la colaboración y el intercambio de información en tiempo real entre: productores, proveedores, transportistas, distribuidores y clientes, lo que se traduce en una mayor transparencia y una mejor coordinación de las operaciones. https://omcpl.org/logistica-justa/
El Nearshoring
Es una estrategia empresarial que consiste en trasladar procesos, servicios y funciones de una zona a otra que tenga menor distancia geográfica. Por ejemplo, una empresa con sede en X país puede decidir trasladar sus actividades de producción u operaciones de atención al cliente al otro lado de la frontera o más cercano a él; si así lo considera beneficioso para sus objetivos.
Es importante mencionar que el Nearshoring es una estrategia que consiste en la externalización de servicios o procesos empresariales a países cercanos, dentro de un mismo Continente o región; en lugar de optar por países lejanos como China o India, como lo es el Offshoring. Esto fue una reconfiguración a la que obligó la disrupción provocada por el Covid-19.
El Nearshoring se transformó en la clave para impulsar la economía de un país. Ya que, este método no sólo atrae inversión extranjera, (les permitiría a los inversionistas adaptarse rápidamente a los cambios en la demanda del mercado, además de aumentar el potencial de crecimiento de una empresa y mejorar su rentabilidad a mediano plazo) sino que también crea empleos y mejora el nivel de vida de la población. Al establecer esta estrategia en una nueva región, las empresas suelen invertir en infraestructura, tecnología y capacitación, lo que provoca un efecto positivo en la economía local. La región de América Latina está aprovechando muy bien esta instancia.
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